El proceso de montaje y confección de un zapato es fundamental en la industria del calzado, abarcando diversas etapas críticas que aseguran la calidad y durabilidad del producto final. Este post quiere dar una visión detallada de cada uno de estos pasos esenciales.
- Aparado y preparación inicial: El inicio del proceso de confección de un zapato comienza con el aparado, donde se cosen y unen los cortes de piel o cualquier otro material seleccionado. Este paso es crucial para la resistencia y el acabado del zapato. Se emplea un adhesivo especial que permite la unión de las piezas pero que puede ser reversible para ajustes durante el proceso.
- Embastado: El embastado implica la colocación del contrafuerte en el talón y el tope en la puntera, utilizando adhesivos específicos para cada tipo de material. Esta etapa se realiza manualmente, asegurando que tanto el contrafuerte como el tope queden correctamente alineados y adheridos antes de ser moldeados.
- Moldeado: La máquina de moldear utiliza moldes de aluminio calentados internamente para dar forma al corte del zapato, seguido de un molde frío que estabiliza y perfecciona esta forma. Esta fase no solo modela el zapato sino que también ayuda a secar los adhesivos aplicados en etapas anteriores, consolidando la estructura del zapato.
- Forro y Montaje: El forro del zapato, que está en contacto directo con el pie, es esencial para la comodidad y la prevención de problemas alérgicos o de transpiración. El montaje posterior involucra colocar el corte sobre la horma, ajustando y moldeando el material para comenzar a formar la estructura final del zapato. Aquí, la horma juega un papel crucial, ya que imita la forma del pie humano y facilita la tarea de dar forma al calzado.
- Fijación y pegado: Una vez montado sobre la horma, se procede a fijar la planta, una pieza crucial entre el corte y la suela, utilizando métodos como tachuelas o termoplásticos. El pegado es uno de los sistemas más utilizados para adherir el corte a la suela, destacando por su coste-eficiencia y facilidad de aplicación. Este proceso incluye la preparación de la superficie, la aplicación de un primer y del pegamento, seguido de un proceso de calentamiento en horno para activar el adhesivo.
- Acabado y control de calidad: Finalmente, el zapato pasa por un proceso de prensado para asegurar una adhesión óptima y, dependiendo de los requisitos del cliente, puede pasar a una costura de refuerzo o directamente al departamento de adorno. Es vital seguir estrictamente las indicaciones del fabricante durante todo el proceso para evitar problemas de calidad.
Este meticuloso proceso garantiza que cada par de zapatos no solo cumpla con las expectativas de diseño y comodidad, sino que también resista el uso diario, reflejando la calidad y el cuidado que Quinorgan pone en la fabricación de los componentes para la fabricación de calzado.